En el centro de la isla, Binissalem te permite disfrutar de una atmósfera relajada y conectar de lleno con la naturaleza. Vivir en Binissalem es vivir en un entorno natural con paisajes y viñedos de ensueño, ya que la producción de vino es el motor económico de la localidad. Lleno de patrimonio y cultura, Binissalem tiene mucho que ver y hacer: tours vinícolas, excursiones a pie y bicicleta, experiencias gourmets acompañadas de vinos de la zona, etc. Binissalem ofrece buenas conexiones con el aeropuerto y centro de Palma, a menos de 30 minutos en coche.
En general, el pueblo tiene muchos puntos de interés histórico, entre ellos la pequeña y bonita iglesia de Santa María Robines, que es un buen ejemplo del barroco del siglo XVIII, con conocidas estatuas situadas en el exterior que representan la producción de vino. En la misma plaza central de la iglesia, lugar de encuentro de vecinos, se puede disfrutar del mercado semanal los viernes por la mañana y de un mercado nocturno con música y baile en los meses de verano.
La mayor parte de la producción de Mallorca (hortalizas, patatas, legumbres, vino y productos lácteos) se vende y consume localmente. Binissalem, que es zona de cultivo por sus tierras fértiles, te permite obtener productos de temporada y a mejores precios, ayudando así a la economía local. También es un buen lugar para comprar productos auténticos de Mallorca, ya que muchos artistas locales trabajan en esta zona produciendo artículos de piedra, cerámica, pintura, escultura y tela.
En la localidad destacan dos eventos importantes que atraen a muchos visitantes, la Festa des Vermar en otoño y la Demostración de picapedreros en mayo. Asimismo, su cercanía a los pueblos de Santa María y Santa Eugenia, permite, al igual que en Binissalem disfrutar de otros eventos interesantes y, por supuesto, de una gran selección de bodegas de vinos a las que visitar.
Al tratarse de un pueblo de interior no faltan opciones para realizar actividades de naturaleza. Las llanuras que rodean a Binissalem hacen que la práctica de senderismo y ciclismo sean relativamente moderadas, permitiendo hacer diferentes rutas desde las que deleitarse con unas vistas espectaculares a las montañas.
Si estás pensando en comprar una vivienda en un pueblo con gran encanto rural pero a la vez cercano al centro de Palma, a las playas, calas y montañas mallorquinas, sin duda, Binissalem es el lugar perfecto. Te dejará asombrado por sus viñedos, su antigua historia, su encantadora arquitectura y sus restaurantes tradicionales.
En Binissalem hay varios colegios públicos y concertados, así como una escuela alternativa Sa Llavor, donde su metodología se centra en “el arte de vivir”.
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